Un All Star siempre es motivo de diversión y espectáculo para el espectador. Sin embargo, esta edición no ha sido tan “amazing” como esperábamos…
En partido de Rookies y Sophomores fue como todos: cero defensas y varios jugadores peleando para ver quien se tira hasta las zapatillas. Pero ocurrió que los Rookies ganaron a los jugadores de segundo año ocho años después. Algo anecdótico.
El sábado es el dia de las emociones, de los concursos, de los habilidosos, pistoleros y matadores. Los habilidosos dejaron su sello, llevándoselo Steve Nash. Se esperaba a los pistoleros, pero sus pistolas parecían descargadas. Pierce se llevo un concurso en el que faltaban verdaderos artilleros de perímetro. Ya no hay esos Bird, Hornacek, Stojakovic o Kapono. Sino que viene Pierce, cuya mecánica de tiro es lenta y gana…
Y llegamos al domingo, al partido. El partido en el que faltaba Kobe, Iverson , Roy o Paul. Pero estaban Wade, Lebron, Carmelo… y nuestro Pau. El partido fueron puntos y algún detallito para los cien mil aficionados del Cowboy Stadium. Pero no tenía la emoción, ni el espíritu. Ahora es puro marketing y ver quien lleva las zapatillas mas llamativas o a ver quien lleva mas adornos puestos.
Espero que en el próximo se mire más al exterior y no al ombligo propio.
PD: El jueves empieza